El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, dispuso el abastecimiento de comida y alimentos a los reclusos y personal policial y del Ministerio Público del Penal de la Victoria, que fue inundado por las aguas del río Yuca y los mantenía aislados.
La medida fue dispuesta luego que reclusos llamaran a la Z101 y se quejaran de la precariedad en los servicios del recinto y la no entrega de raciones alimenticias.
En tanto que la direccón policial y la administración del penal prohibieron las visitas de familiares de los reclusos, porque las celdas de la parte baja continuaban inundadas todavía la tarde de este domingo.
Durante un recorrido por la cárcel de La Victoria, Domínguez Brito dispuso un operativo de contingencia, que incluye alimentación y suministro de agua, hasta tanto ds reduzca la amenaza de las aguas.
La anegación del penal obligó a las autoridades del recinto a trasladar de varias celdas a los reclusos.
El funcionario acudió junto al ministro de Salud Pública, Freddy Hidalgo, y el director general de Prisiones, Tomás Holguín De La Paz, donde instruyó para que adopten medidas que garanticen la vida de los seis mil internos.
"Hemos dado instrucciones para que ante todo se preserve la vida de todos los privados de libertad que tenemos en La Victoria, en donde habita actualmente el 30 % de la población carcelaria de nuestro país. Hasta el momento la situación está bajo control, dentro de las precariedades, pero estamos trabajando de la mano con Salud Pública, las Fuerzas Armadas y los Comedores Económicos, para garantizar la seguridad, la alimentación y las atenciones médicas a todos los reclusos", informó el Procurador.
Centenares de raciones alimenticias, colchones, sábanas y medicamentos fueron enviados por el Ministerio de Salud Pública a La Victoria, así como una gran cantidad de alimentos para ser preparados por los Comedores Económicos, para asegurar la alimentación tanto de los reclusos, como de todo el personal de vigilancia y administrativo, para lo cual fueron instaladas tres unidades móviles de los comedores.
Igualmente, permanecen en el lugar dos unidades móviles del Ministerio de Salud Pública, para dar respuesta en caso de que ameriten asistencia médica rápida para los internos.
Las quejas de los reclusos
Previo a la decisión de Domínguez Brito, un recluso de LaVictoria informó mediante una llamada telefónica a la Z101 que en ese centro penitenciario tllevaban cuatro días sin agua potable, sin energía eléctrica ni comida.
El reo, que pidió no ser identificado por razones de seguridad, indicó que la comida es poca, no tienen carbón para cocinar ni agua para beber.
Expresó que había un caos enel recinto penitenciario y muchos reos sufren de dolores de estomágo por el hambre y que la noche del sábado se habría producido una riña por las codiciones de hacinamiento.
Prohiben las visitas
La tarde de este domingo familiares de los reos que acudieron a visitarlos denunciaron que fueon impedidos de entrar al recinto.
Los policías de servicio alegaron que todavía las celdas de la parte baja continuaban bajos las aguas del río Yuca, que lo inunda con sus crecidas por las lluvias.
Los familiares expresaron sus quejas, porque según dijeron desconocen los estados y situaciones reales de los reclusos.
Dijeron que las autoridades carcelarias solo les dicen que no pueden pasar porque las celdas están inundadas. Z101 digital.com
La medida fue dispuesta luego que reclusos llamaran a la Z101 y se quejaran de la precariedad en los servicios del recinto y la no entrega de raciones alimenticias.
En tanto que la direccón policial y la administración del penal prohibieron las visitas de familiares de los reclusos, porque las celdas de la parte baja continuaban inundadas todavía la tarde de este domingo.
Durante un recorrido por la cárcel de La Victoria, Domínguez Brito dispuso un operativo de contingencia, que incluye alimentación y suministro de agua, hasta tanto ds reduzca la amenaza de las aguas.
La anegación del penal obligó a las autoridades del recinto a trasladar de varias celdas a los reclusos.
El funcionario acudió junto al ministro de Salud Pública, Freddy Hidalgo, y el director general de Prisiones, Tomás Holguín De La Paz, donde instruyó para que adopten medidas que garanticen la vida de los seis mil internos.
"Hemos dado instrucciones para que ante todo se preserve la vida de todos los privados de libertad que tenemos en La Victoria, en donde habita actualmente el 30 % de la población carcelaria de nuestro país. Hasta el momento la situación está bajo control, dentro de las precariedades, pero estamos trabajando de la mano con Salud Pública, las Fuerzas Armadas y los Comedores Económicos, para garantizar la seguridad, la alimentación y las atenciones médicas a todos los reclusos", informó el Procurador.
Centenares de raciones alimenticias, colchones, sábanas y medicamentos fueron enviados por el Ministerio de Salud Pública a La Victoria, así como una gran cantidad de alimentos para ser preparados por los Comedores Económicos, para asegurar la alimentación tanto de los reclusos, como de todo el personal de vigilancia y administrativo, para lo cual fueron instaladas tres unidades móviles de los comedores.
Igualmente, permanecen en el lugar dos unidades móviles del Ministerio de Salud Pública, para dar respuesta en caso de que ameriten asistencia médica rápida para los internos.
Las quejas de los reclusos
Previo a la decisión de Domínguez Brito, un recluso de LaVictoria informó mediante una llamada telefónica a la Z101 que en ese centro penitenciario tllevaban cuatro días sin agua potable, sin energía eléctrica ni comida.
El reo, que pidió no ser identificado por razones de seguridad, indicó que la comida es poca, no tienen carbón para cocinar ni agua para beber.
Expresó que había un caos enel recinto penitenciario y muchos reos sufren de dolores de estomágo por el hambre y que la noche del sábado se habría producido una riña por las codiciones de hacinamiento.
Prohiben las visitas
La tarde de este domingo familiares de los reos que acudieron a visitarlos denunciaron que fueon impedidos de entrar al recinto.
Los policías de servicio alegaron que todavía las celdas de la parte baja continuaban bajos las aguas del río Yuca, que lo inunda con sus crecidas por las lluvias.
Los familiares expresaron sus quejas, porque según dijeron desconocen los estados y situaciones reales de los reclusos.
Dijeron que las autoridades carcelarias solo les dicen que no pueden pasar porque las celdas están inundadas. Z101 digital.com
