Mao-. El paso del tiempo, la falta de mantenimiento y el robo de metales se han convertido en las causas más comunes del deterioro que presentan los principales puentes de la región Noroeste.
Algunas estructuras parecen esqueletos de hierro corroídos por el óxido o mutilados por los delincuentes que convierten los metales en dinero y en otros casos se observan angostos espacios de cemento sobre débiles bases a punto de colapsar.
El Secretario Ejecutivo del Instituto para el Desarrollo del Noroeste (INDENOR), Miguel Andrés Betances, afirmó que los puentes de la región, en su gran mayoría son obsoletos y además han sido víctimas del descuido de las autoridades.
Citó el caso del puente sobre el río Guayubincito en la comunidad de Mangá, municipio Guayubín, que fue construido en el año 1960 y además de que es “sumamente estrecho, es una estructura de hierro viejo, insegura y en estado deplorable debido a su estado de oxidación”.
La misma situación ocurre en el puente de Ámina, por donde no caben dos vehículos al mismo tiempo y sus bases en concreto armado se han ido hundiendo de manera paulatina y cada vez que llueve el estancamiento de ramas y grandes árboles provocan que las aguas inunden toda el área.
Betances Sosa citó también el caso del puente sobre el río Yaque del Norte por la parte que comunica el distrito municipal de Ámina con el municipio de Esperanza, una estructura de hierro oxidado, parte de la cual ha sido destruida por las cortadoras de arroz transportadas sobre patanas. NOTICIAS DEL NOROESTE. Jose L R.