Si piensa que es por morbo o por alguna fantasía sexual creo que se equivoco, Los hombres miramos o nos gustan los traseros simplemente por que obedecemos a un instinto primitivo que se activa inconscientemente en nuestro cerebro por razones naturales y genéticas, y los instintos se logran controlar, más, imposible dominar o erradicar.
“LA GRASA HUMANA”, que en sus “GLÚTEOS O NALGAS” al igual que en sus “MAMAS O PECHOS”, son indicadores de el “BUEN ESTADO DE SALUD” de esa “HEMBRA”
Otras teorias son las siguientes , ambas tienen origen en nuestros ancestros, los primeros pobladores que pisaron la tierra y que, supuestamente mantenían relaciones sexuales en 4 patas (de perrito), y por tanto, el trasero de su hembra era lo primero que atraía al macho ya que estaba unido al olfato. De esta manera, esta podría ser la más primitiva fascinación que sienten los hombres modernos por los glúteos.
La segunda razón es sobre las caderas (que también influye en el tamaño del trasero), pues de nueva cuenta en tiempos ancestrales, los machos se fijaban en las mujeres con las caderas más amplias, mismas que garantizaban que los bebés nacerían de una forma más fácil y no morirían como ocurría con las mujeres que tenían las caderas más estrechas, por tal motivo los machos se fijaban en las caderas/trasero para seleccionar a las hembras, lo cual se ha quedado grabado y por instinto ahora los hombres siguen haciendo.
La vista es el más poderoso de los sentidos que posee el ser humano, ante este hecho, el cerebro humano procesa inconscientemente la información de lo que ve, reconociendo en este caso que es una buena candidata para procrear hijos saludables, de manera que en ella existe la posibilidad de mantener y prolongar sus “GENES”. Todo esto ocurre inconscientemente en fracciones de segundos.
Visto de otra manera, a que hombre le parece atractiva o despierta apetito sexual, una mujer desnutrida o enferma. La grasa en el ser humano como en muchos animales es síntoma de buena salud.
Este mismo instinto da origen al sentimiento de gusto o placer que séntimos los hombres, con solo mirar los hermosos cuerpos (Glúteos y Pechos), que poseen nuestras “Hembras”, y que inevitablemente activa el deseo sexual.
Lo mismo ocurre en el cerebro de las mujeres, de allí la famosa apetencia de buscar hombres con prototipos de físico atlético, con abdomen de cuadritos, los brazos musculosos y la activación del deseo sexual que también en ellas producen sus miradas deseosas.FUENTE TEXTOTERONA.COM
