El Pentágono está listo para una acción militar en Siria

AFP
Washington
El presidente estadounidense, Barack Obama, se reunió ayer  sábado con sus consejeros en seguridad para discutir acerca de una eventual respuesta al gobierno sirio por su presunta utilización de armas químicas, mientras el Pentágono anunció estar preparado para una acción militar.
El encuentro de Obama con su Consejo de Seguridad Nacional se produjo luego de que la asociación Médicos sin Fronteras (MSF) dijo que más de 350 personas fallecidas en un ataque producido el miércoles en los alrededores de Damasco presentaban síntomas “neurotóxicos”
.
La Casa Blanca dijo en un comunicado que todavía está analizando la situación para determinar lo ocurrido. “En coordinación con sus socios extranjeros y a partir de decenas de testimonios y registros de los síntomas presentados por las personas fallecidas, la comunidad de inteligencia de Estados Unidos continúa examinando los hechos para tener certezas sobre lo ocurrido”, señaló la presidencia.
Obama y el primer ministro británico, David Cameron, hablaron ayer sábado por teléfono y expresaron su “grave preocupación” por las informaciones que dan cuenta del uso de armas químicas contra civiles por parte del régimen sirio Un comunicado de la Casa Blanca sostiene que ambos líderes “continuarán consultándose” acerca de “la posible respuesta de la comunidad internacional a esa utilización de armas químicas”.  Obama “recibió también el abanico de opciones que solicitó para que Estados Unidos y la comunidad internacional consideren a la hora de responder al uso de armas químicas”, agregó la presidencia.
El gobierno británico, por su parte, señaló en un comunicado que “Obama y Cameron están fuertemente preocupados por (...) los crecientes signos de un significativo ataque con armas químicas llevado a cabo por el gobierno sirio contra su propio pueblo”.
La Casa Blanca se encuentra bajo presión después de que la oposición siria acusara al régimen de Asad de perpetrar el miércoles un ataque con armas químicas en varios suburbios de Damasco en poder de los rebeldes, provocando la muerte de 1.300 personas.
Damasco rechazó ayer sábado esta acusación, pero culpó a su vez a los rebeldes de usar armas químicas en los combates en la capital.
A diferencia de sus aliados europeos, el gobierno estadounidense mantiene una postura extremadamente prudente ante estas acusaciones.
Sin embargo, Hagel anunció el despliegue de medios militares para ofrecer a Obama “opciones” en el caso de que éste decida intervenir en Siria.
Entre estos está el envío al Mediterráneo de un cuarto destructor equipado con misiles de crucero, informó una fuente del Pentágono.
En junio, la Casa Blanca admitió que el régimen de Asad había llevado a cabo un ataque químico, pero no volvió a mencionar la “línea roja”, aunque incrementó su ayuda a los rebeldes.
EL PELIGRO DE DESATAR MÁS VIOLENCIA EN LA REGIÓN
El ministro de Información de Siria, Omran al-Zoubi descartó la posibilidad de un ataque estadounidense y advirtió que una acción de ese tipo conllevaría el peligro de desatar más violencia en la región.
“La repercusión elemental sería una llamarada que incendiaría no sólo a Siria, sino todo Oriente Medio”, dijo al-Zoubi en entrevista con la Televisora al-Mayadeen, con sede en Líbano. “Un ataque contra siria no será un día de campo”, apuntó. 
En Teherán, el portavoz del Ministerio del Exterior de Irán, Abbas Arakji, advirtió que una intervención militar estadounidense en Siria “complicará las cosas”. “Enviar barcos de guerra no resolverá los problemas, agravará la situación”, dijo Arakji en declaraciones que difundió la televisora iraní Al- Alam. Afirmó que la movilización de esa fuerza naval carece del respaldo internacional e Irán “rechaza cualquier solución militar”