Aunque se desconoce la cantidad de enajenados mentales que deambulan por las calles de todo el país, se sabe que son muchos y que en su mayoría están abandonados a su suerte por sus familiares, situación que los obliga a subsistir con lo que encuentran “en medio de su locura”.
Si bien es cierto que existe una Ley que regula el tratamiento que el Estado debe garantizarle a las personas que padecen enfermedades mentales, ésta no se cumple en más de un 90%. Las políticas que se deberían llevar a cabo para encarar este problema social no se realizan.
Según el inciso B del artículo 10 de la Ley sobre la Salud Mental 12-06, es derecho “básico y fundamental” de las personas con problemas metales el tener acceso a la mejor atención disponible en materia de salud mental y adecuada a sus antecedentes culturales en todos los establecimientos hospitalarios públicos y privados del país, y que abarque cualquiera de los distintos niveles de atención primaria, secundaria o terciaria.
En la actualidad, apenas existe un hospital psiquiátrico (el Padre Billini) para atender a todos los enfermos mentales del territorio. En algunos centros médicos especializados se atiende, de manera superficial, a los enfermos de este tipo.
Sobre el tema, el presidente de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría, Vicente Vargas, señaló que en los hospitales especializados existen departamentos para tratar enfermedades mentales, pero que debería haber una unidad de psiquiatría para consultas e internamientos.
“Aquí en la ciudad debe existir una ‘casa de acogida’, por lo menos en los barrios más pobres. Un sitio que recoja esa gente… Se necesita modernizar el sistema, 'el 28' (hospital psiquiátrico) se hizo hace 'cuchumil' años con el fin de proteger a la sociedad de los enfermos mentales cuando' en realidad' es todo lo contrario... Los hospitales deben proteger a la gente”, precisó el dirigente gremial.
Vargas sostuvo que en el país es necesario cambiar “totalmente” las estructuras de atención al paciente con problemas mentales y consideró que, en cuanto al tema, el Estado se ha quedado pasivo, proveyendo una mínima inversión para el sector.
Número de enfermos mentales desconocido
De igual mod,o artículo 3 inciso E de la referida ley contempla que el Estado debe realizar estudios epidemiológicos periódicamente, a fin de diseñar una política de prevención y atención para cada región de salud que incorpore a los diferentes trastornos y las diferentes poblaciones en riesgo. En los siete años que la ley tiene promulgada, no se ha efectuado el primer registro de enfermos mentales en el país.
La Sociedad Dominicana de Psiquiatría informó que gestiona la ejecución de un censo y un estudio epidemiológico mediante la Oficina Nacional de Estadística, con el fin de conocer la cantidad de enfermos mentales por diagnóstico en el país.
“No sabemos a ciencia cierta cuál es el número de enfermos mentales en República Dominicana y, aunque sería difícil de averiguar, proponemos que se haga por los diagnósticos en todos los hospitales del país”, comentó el presidente de la institución.
Mal distribución de psiquiatras
El doctor señaló como otra de las deficiencias del sistema que, de los 220 psiquiatras que hay en el país, de los cuales apenas 180 ejercen, la mayoría están concentrados en el Distrito Nacional, el gran Santo Domingo, Santiago y San Francisco.
Criticó, además, que haya enfermos mentales que se tengan que trasladar de provincia en provincia para tratarse con un especialista del área, por lo que demandó del Gobierno la regularización de los profesionales de la psiquiatría en todo el territorio nacional.
ARS no dan cobertura a enfermos mentales
El más grave incumplimiento de la ley –a juicio de la Sociedad de Psiquiatría- es que las Aseguradoras de Riesgos Laborales (ARS) no contemplen en sus planes de cobertura las enfermedades mentales, a pesar de que la norma lo especifica.
En problemas de salud en el que el diagnóstico de un medicamento puede ser esencial para que la enfermedad mengue, se controle o se cure, los pacientes mentales no cuentan con una cobertura de salud que les auxilie con los gastos. Hay medicamentos pueden evitar la muerte, como en el caso de los que se utilizan para la depresión.
El 50% de los esquizofrénicos intentan suicidarse al menos una vez en su vida y un 15% lo logra. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión es actualmente la tercera enfermedad en importancia causante de discapacidad en el mundo. Mientras que la OMS prevé que en 2020 se convertirá en la segunda enfermedad con mayor carga social.
“Necesitamos que haya más voluntad política de los organismos para que la gente reciba la mayor atención… Gran parte de los dominicanos no están recibiendo la salud necesaria. Estamos permanentemente denunciando que muchas ARS se niegan a reconocer los problemas mentales como una enfermedad, es como si las ARS pensaran que el ser humano no tiene cerebro”, opinó el psiquiatra Vicente Vargas.
Hay ARS que cubren las enfermedades con una asignación de apenas 3,000 pesos anuales, cuando el gasto por tratamiento de una enfermedad de este tipo puede ser entre 10 mil a 30 mil pesos mensuales.
Dominicanos piensan que psiquiatras son para "los locos"
Con relación a la percepción que tienen los dominicanos sobre los psiquiatras, el especialista en el área Vicente Vargas afirmó que "en el país la mayoría de personas se ofende si se les recomienda visitar un psiquiatra".
“Aunque continúan las falsas creencias sobre la visita médica a un experto, la gente ha ido entendiendo que la psiquiatría es una especialidad como cualquiera otra. Todo el mundo tiene que ir al médico… La mujer tiene que ir al ginecólogo aunque no esté embarazada, todas las personas deberían ir donde su psiquiatra o psicoterapeuta”, precisó.
Vargas señaló que los psiquiatras “no sólo son para los locos”, sino que fungen como consejeros para intervenir en cualquier problema entre parejas o amigos, buscando que las personas tengan una mayor calidad de vida.
Indicó que quienes poseen un alto nivel cultural e intelectual en países desarrollados visitan regularmente a un psiquiatra y tratan a quien no lo hacen como un “chopo” o alguien sin formación ni educación.
“La gente de 'nivel' siempre va al psiquiatra porque es el que te escucha… La vida que vale la pena es una vida que debe ser analizada. Aquí a la gente la llevan al psiquiatra cuando está loco, que se encuera en la calle”, significó el experto.
