Se trata de dos oficiales de tránsito, en China, que decidieron dejar a un lado sus obligaciones para arreglar sus diferencias a golpes y arañazos.
Una tercera mujer que laboraba, posiblemente desde otro punto un poco más alejado, se acercó para tratar de separarlas y mantener la paz.
En menos de dos días el video alcanzó más de 100 mil reproducciones.