La exuberante Pamela Anderson volvió a hacer gala de su innegable atractivo físico a la salida de un restaurante de Los Ángeles donde almorzó con su hijo Dylan. Vestida con una delicada blusa blanca desabrochada y una ajustada falda beige, la que fuera 'vigilante de la playa' en la década de los 90 apostó por su más comedido y, de esta forma, no dejó que nada eclipsara su reciente corte de pelo. BangShowBiz